Universidad Católica Campeón de Honor 2009
T. de Honor: Católica 1(4) vs Malvín 59 1(3)
La Católica se quedó con el Torneo de Honor, luego de empatar en un tanto por bando con Malvín 59. En los penales, la mejor eficacia estuvo del lado de la Católica, ya que convirtieron, Federico Fernández, Fabián Canaveris, Gonzalo Bravo y Germán Pereiro. Satisfacción por el deber cumplido, llegar nuevamente a una final y haber hecho los méritos para triunfar en los 90 minutos. Esas son las cosas positivas que se lleva Malvín “59”.
Dos informes en uno, con la cobertura de dos periodistas en la final. Dos puntos de vista para dos equipos que se jugaban mucho. Finalmente la U se quedó con el título y desató la locura generalizada de si gente.
Así lo vimos a la U Católica
Por/
Germán Morosoli-
Un comienzo que no fue para nada bueno para los dirigidos por Gustavo Rehermann, ya que los celestes, se adueñaron de la mitad de la cancha, y tuvieron a mal traer a la última zona de la Católica. Una defensa que en el primer tiempo, perdió en varias oportunidades por el juego aéreo, Jorge García, con mucha clase y oficio ganó en las dos áreas y se aprovechó de los quedes defensivos del conjunto “Catolero”
Poco para destacar en un conjunto que en el Torneo de Honor había mostrado muy buenas individualidades y un gran juego colectivo, solo para destacar, alguna combinación ofensiva, pero de poco peso, por parte de Marco Gentini.
El complemento, fue muy similar. Católica no salía de la última zona y los embates de Malvín fueron constantes, y apareció la figura de Martín Acosta, que rindió de gran manera a lo largo de todo el Torneo.
En uno de los tantos centros y en un quede defensivo, nuevamente Malvín ganó en el juego por alto y tras un rebote, Germán Parillo, definió con el arco desguarnecido, marcando el uno a cero.
Ya con tres cambios, la Católica se fue en busca del empate, que llegó a diez minutos del final. Germán Pereiro, metió un milimétrico pase a Federico Fernández a espaldas de Javier Goñi y definió arriba a la izquierda de Juan Gonnet, decretando el uno a uno.
Sobre el final, Parrillo, aprovechó un descuido en el fondo de la Católica y se perdió el segundo tanto.
En los penales, la mejor eficacia estuvo del lado de la Católica, ya que convirtieron, Federico Fernández, Fabián Canaveris, Gonzalo Bravo y Germán Pereiro.
Así lo vimos a Malvin 59
Por Francisco Queraltó
Pouck7@hotmail.com
Satisfacción por el deber cumplido, llegar nuevamente a una final y haber hecho los méritos para triunfar en los 90 minutos. Esas son las cosas positivas que se lleva Malvín “59” luego de empatar y perder por tiros penales frente a Universidad Católica.
Mañana ideal para disputar una final. Cielo despejado, cancha en perfectas condiciones, el único inconveniente fue el excesivo calor que hizo a las 10 de la mañana en el Parque Central.
Malvín “59” se reunió en uno de los vestuarios del estadio donde realizó allí la charla técnica y la arenga final. Luego pasó a la sala de calentamiento para finalmente ingresar al campo de juego, “un billar” como se dice comúnmente, el escenario soñado para cualquier jugador de la Liga.
El inicio del partido se dio con la hegemonía de Malvín, todos los balones pasaron por los pies de Diego Suárez, el número diez que tuvo una actuación notable. La primera acción de peligro vino de sus pies, cuando a los siete minutos lanzó un tiro libre desde 40 metros, cabeceó el zaguero Jorge García y la pelota se estrelló en el travesaño.
El trámite del juego continuó siendo celeste, Suárez puso varios pases milimétricos a los delanteros que estos no pudieron concretar en la red.
A los 30’ el lateral izquierdo Javier Goñi cabeceó el balón al arco, pero el gol no fue convalidado por posición adelantada, que no fue mayormente protestada.
Las chances más claras de los primeros 45’ las tuvo Malvín “59”, Diego Suárez manejó los hilos del ataque playero, lanzó centros, dio pases certeros y remató en varias ocasiones al arco de Católica.
En la parte complementaria el dominio continuó siendo del equipo dirigido por Jorge Grajales, se sucedieron remates de Diego Suárez y de los delanteros que no consiguieron el destino deseado.
La apertura del marcador llegó a los 18’ tras un tiro libre ejecutado por Suárez, el arquero Fernández no pudo retener el balón, se dieron una serie de rebotes y Germán Parrillo, con el arquero ya vencido no tuvo más que empujar la pelota a la red.
Continuó el dominio celeste, pero a los 35’ se produjo la igualdad que desconcertó al equipo, el trámite de juego no condecía con el resultado, pero en fútbol si no se concreta en área rival se paga en la propia.
Los instantes finales del encuentro tuvieron al playero con situaciones de gol, la última jugada tuvo a Parrillo como protagonista, que remató pegado al palo. El partido mereció finalizar en el tiempo regular por la cantidad de chances que creó Malvín, pero Católica aprovechó una de sus pocas oportunidades y luego ganó en los tiros penales.
Hinchas y jugadores se fueron con la tristeza lógica de haber perdido una final, pero se fueron con la frente en alto porque tuvieron una buena preparación para la temporada y llegaron nuevamente a la definición de un campeonato.